Amigo es importante para tu cura leas y releeas y comentes este testimonio genuino!!!
Hacele caso a tu Maestro...hace lo que el te pide!!!!
Estimado Profesor,
Quiero relatarle el último encuentro sexual con mi esposa y algunas reflexiones que me surgieron posteriormente.
- Fue en la mañana del sábado, en nuestra habitación, pues estábamos solos en casa y teníamos todo el tiempo del mundo. Comencé con muchas caricias y ternura, logré excitarla bastante (cabe señalar que mi esposa esta comenzando la menopausia con lo que se ha dificultado un poco la lubricación y tiene descargas de calor, bochornos, frecuentes). Después de bastante rato hubo penetración (misionero) y ella llegó al orgasmo con estimulación de clítoris. Al ver que yo no había acabado, se subió encima mío, con penetración, y seguimos así, con estimulación del clítoris y tuvo su segundo orgasmo. Yo durante todo el proceso fui practicando apnea y no estuve ni cerca de eyacular, ni aun cuando se subió encima mío algo frenéticamente. MUY BIEN, OBJETIVO CUMPLIDO, las caricias y la apnea son técnica poderosísimas, sumadas a la predisposición a no eyacular practicada durante la MT. Fueron no menos de 30 minutos.
- Reflexion 1: me preguntó ¿por qué tan duro para eyacular, dónde estas practicando por fuera?. Obviamente me hice cargo del tema. Simplemente le dije que me aguantaba para darle más placer a ella y que no hablara tonteras. Claramente estos 22 años de matrimonio han establecido una rutina sexual de rápida excitación (mutua), orgasmos y a dormir. Las caricias y el proceso previo no han sido más que un instrumento para lograr la excitación y el orgasmo. Ella lo ha asumido asi y yo también, hasta esta curación. No es una queja, sería muy injusto de mi parte exigirle a ella un comportamiento diferente, si no esta ni cerca de saber en lo que yo he estado este tiempo junto a sus consejos Profesor. Veo claro eso si, que si quiero modificar esta rutina sexual, debo encontrar la forma de irla introduciendo en esta nueva manera de tener el encuentro sexual, en que el proceso previo es lo principal, gozar el tiempo juntos, con ternura e intimidad. Quedo abierto, estimado profesor a sus consejos.
- Refelxión 2: durante la relación, antes del primer orgasmo y durante la penetración en la posición del misionero, practiqué 4 penetraciones superficiales y una profunda. Quería seguir asi, pero me dijo: “al parecer mis paredes no estén tan sensibles como antes, por que se me tienden a pasar las ganas”. Pasé entonces a una penetración menos suave con estimulación del clítoris y todo bien. Llegó a su orgasmo. UN poco relacionado con la reflexión anterior, veo que el cambio de rutina surtió un gran efecto en la parte previa de las caricias, pero la lentitud de la relación al parecer tiende a “des-excitarla”. Años y años de sexo más rápido han marcado una rutina que incluso afecta su grado de excitación.
- Reflexión 3: quedé muy tranquilo y contento del logro de no eyacular y mantener penetraciones y posiciones variadas sin temor a descargar. No creo estar curado 100% pero creo que ha sido un examen pasado bastante satisfactoriamente. El tema en esta reflexión, es que no tuve orgasmo. No he llegado todavía a desarrollar el orgasmo sin eyacular, por lo que quedé con una ligera sensación de insatisfacción. Hay un camino más bien largo que desarrollar en esto de los orgasmos sin eyacular.
- Estoy más que contento con los resultados y veo las reflexiones como “nuevas tareas” a acometer para lograr encuentros sexuales más satisfactorios cada día.
Este período de vacaciones en que no están los hijos, nos ha permitido aumentar en forma importante la frecuencia de las relaciones sexuales con mi esposa.
Quería relatarle un nuevo encuentro sexual con ella. Esta vez fue de noche, con una copa de vino cada uno. La rutina fue similar a la anterior. Muchas caricias, besos, estimulación manual, oral, casi todo de mi hacia ella. UN par de veces la dejé hacerme sexo oral, pero la detuve para mantener la calma y durar. Lo mismo con las penetraciones, al principio solo algunos segundos para evitar ir más allá.
El encuentro duró algo más de 30 minutos y no eyaculé, ni durante ni después. Lo que si ocurrió, alrededor del minuto 20 fue que la urgencia por eyacular se disipó y pude estar dentro de ella, en variadas posiciones durante un rato largo. Pude jugar con su cuerpo y disfrutarlo sin urgencia y sin el temor a eyacular, pero con todas las ganas y excitación.
Lo que si es que la penetración suave y de a poco, jugando en la entrada de la vagina, la desespera y prefiere rápida penetración y llegar al orgasmo. Me lo dijo, "son muchos años de sexo de esta manera". Si querer y sin que yo se lo haya dicho, interpretó lo que yo pienso al respecto: han sido más de 20 años de encuentros sexuales de una determinada manera; hay que trabajar y de apoco conseguir cambiarla.
Me esta costando llevarla a esta nueva práctica. Ya se dio cuenta que hay un cambio, lo que es un avance, pero no estoy seguro cómo seguir. ¿Continúo con la misma rutina?.
Cabe señalar que ya aceptó, con buena disposición, el hecho que yo no eyacule, pues le insistí en que asi todo duraba más y había más disfrute. Lo que también es un avance creo.
